Las minas de carbón de Ogassa, que se explotaron entre finales del siglo XVII y 1967, convierten este municipio del Ripollès en un núcleo que conserva todas las características arquitectónicas de un pueblo minero. Destacan las minas de La Dolça, El Pinter y La Gallina, así como los planos inclinados, el cable aéreo, la estación o la fábrica de panes de carbón, recientemente rehabilitada.

La concentración minera de esta zona motivó la llegada del ferrocarril al Ripollès en 1880, a fin de trasladar rápidamente el carbón hacia Barcelona.

El Museo Minero de Ogassa se ubica en la fábrica de los panes, y recoge material gráfico, herramientas e historias sobre las costumbres y la forma de vida a la colonia minera. Inaugurado en 2018, permite hacer una visita guiada en el interior del edificio y conocer cómo trabajaban los mineros y el proceso que se seguía para hacer los panes de carbón.

La estación de cable aéreo de Ca l’Ermengol también es visitable, así como la Font Gran, que fue donde se ubicó la primera turbina que generaba electricidad y luz para las viviendas y la industria. También se puede pasear por el barrio del Prat del Pinter, donde hay la iglesia de Santa Bàrbara, hecha por los mineros en honor a su patrona.